domingo, 18 de septiembre de 2011

TRISTE Y OJEROSO

Todos los años lo mismo, el último día de vacaciones no quiero que se acabe,  y siempre me dan las tantas de la mañana sin ser capaz de dormir, Sindrome Postvacacional, se llama eso por lo visto, aunque de toda la vida de Dios se ha llamado perrería; y eso que este año al menos no he empezado a tener esa sensación hasta hace un ratito, cuando empezaba a preparar las cosas para mañana, incluido algunos papeles de la oficina, que imbécil de mí he estado preparando en vacaciones.

La vida, bien, al fin y al cabo y por mucho que me queje al final estoy deseando volver a la rutina y tener unos horarios definidos, (joder no me estoy haciendo mayor, me estoy haciendo viejo).

Por cierto, aqui lo puedo confesar, me ......., no mejor no lo confieso, que coño.

Como podrá observar el observador inteligente, y el menos inteligente también, esta entrada es de un soso exagerado, pero como ya he dejado patente no tiene hoy el servidor el ....... pa muchos farolillos.

De todas formas como el número de seguidores no ha pasado de dos en los últimos cuatro meses tampoco crreo que importe mucho.

A los afortunados que tengan la oportunidad de leer este maravillo blog solo me queda desearles buenas noches y que tenga un buen día mañana.

En mi casa, (bueno la de mi hermano a las 1:33 horas del 19 de Septiembre de 2.011).

Fdo. Yo (quien si no).

Hasta siempre, salud.

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